Adopció de: Keila

Keila estuvo mucho tiempo viviendo en la calle, alimentándose de lo que encontraba en los alrededores de una una urbanización. Es una podenquita de tamaño mediano tirando a pequeño, y muy ligera. Es muy discreta, pasa desapercibida y casi ni te enteras que está. Esa discreción hizo que no supusiera una molestia para los vecinos de la urbanización donde malvivía. Se dejó coger sin problema y se adaptó desde el primer dia a la vida en el refugio. Apta con cualquier perro, es más bien sumisa y un poquito tímida, pero no llega suponer un problema porque es sociable y cariñosa.
Sería una perrita de fácil adopción. Keila es delicada y sensible, y el refugio no es sitio para ella. ¿le ofreces algo más acogedor?