Adopción de Gorda

Gorda fue rescatada de una casa donde vivía en pésimas condiciones. Seguramente nació allí, su madre también fue rescatada. Cuando la recogimos era incapaz de salir de debajo de la cama del miedo que tenía a todo. Las patas las tenía atrofiadas de no caminar. Desde que está con nosotros ha dado un cambio espectacular, es agradecida y cariñosa, siempre sonriendo y buscando el contacto con las personas. Su aspecto general también ha cambiado mucho a mejor, y ahora hace honor a su nombre. Convive en un grupo grande de perros y no tiene ningún problema con ellos. Es respetuosa y cae bien a todos los demás. Es un amor de perrita que se merece un hogar donde le ofrezcan amor, confianza y seguridad.